Metodología educativa

La tutoría es uno de los pilares de nuestro proyecto educativo. Mediante el trabajo del autoconocimiento, aceptación y superación personal; el acompañamiento tutorial es esencial para empoderar y acompañar a todo el alumnado en su crecimiento personal. Un acompañamiento que ayuda también a valorar su progreso en función de las capacidades y el esfuerzo de cada uno.

De forma conjunta y coordinada, el alumno/a, la familia y la escuela establecen un plan personal que recoge los objetivos personales de mejora, y que se va revisando de forma continuada a las entrevistas de tutoría con cada niño o niña y con la familia. Así pues, es importante mantener entrevistas frecuentes con el tutor o la tutora para asegurar la coherencia educativa entre la familia y la escuela. La Escuela valora estas entrevistas muy positivamente y establece un mínimo de tres al año con la familia, y un mínimo de 9 al año con el alumno/a.

La información y el conocimiento llegan hoy a nuestros niños y jóvenes por diversas fuentes. Actualmente, es necesario trabajar con ellos la investigación, la gestión –tratamiento– y, muy especialmente, la formación de criterio para seleccionar la información, procesarla y transformarla en un lenguaje propio (creación de lenguaje) que integre conocimientos previos, experiencias vividas y el pensamiento propio, y sea así APRENDIZAJE o construcción del propio conocimiento.

APRENDER A APRENDER. Nuestro modelo trabaja para garantizar en todo el alumnado las competencias transversales que necesitarán para seguir aprendiendo de manera autónoma: aprender a gestionar y construir conocimiento, aprender entre iguales, aprender a comunicar, y aprender a cooperar. El alumno/a debe ser el auténtico protagonista de su aprendizaje, siempre orientado y motivado por el educador/a. En Virolai se aprende a aprender de forma dinámica y vivencial. Damos las herramientas para que nuestros alumnos estén abiertos a la vida ya la observación del medio que les rodea, para que se hagan preguntas, formulen hipótesis, hagan investigación, lleguen a sus conclusiones y expresen sus razonamientos.

APRENDER EN UN ENTORNO GLOBAL.

Creemos que es fundamental la relación entre los aprendizajes y la vida. Desde este razonamiento, con la ayuda del maestro, debe encontrarse sentido a lo que se hace, a través de la interdisciplinariedad, conectando diferentes ámbitos de aprendizaje basados en las competencias específicas y trabajando en situaciones reales y cotidianas.

Queremos que nuestros alumnos cada día salgan de la escuela con más interrogantes que respuestas, que mantengan la curiosidad, la motivación por aprender, la creatividad y la voluntad de superación y crecimiento a lo largo de toda la vida. Esto lo hacemos mediante:

Nuestro objetivo es que cada uno de nuestros alumnos se conozca y acepte su singularidad de forma positiva. A partir de ese autoconocimiento, se puede proponer su propio crecimiento.

Este proceso se inicia desde que los niños son pequeños, ya que adaptamos la enseñanza a las diferencias de edad, madurez y ritmo de aprendizaje de cada alumno/a, con propuestas concretas e individualizadas. Dedicamos la atención necesaria a los alumnos con necesidades educativas, ya sea por especial dificultad o por facilidad en el aprendizaje, a los que ofrecemos los medios adecuados para su avance, con el apoyo del gabinete psicopedagógico de la Escuela. Asimismo, ponemos al alcance de los alumnos un amplio abanico de recursos personalizados de refuerzos, ampliaciones, tutorías de profesor y optativas diversificadas que aseguren la atención personalizada y el seguimiento del alumnado con distintos ritmos de aprendizaje.

La tecnología está presente en la Escuela de forma transversal, incluso invisible, como un recurso que facilita el aprendizaje. Los alumnos no sólo deben hacer uso de la tecnología como usuarios, sino que deben utilizarla para crear nueva, dando el salto de usuarios a creadores digitales. La incorporación de la programación en las aulas forma parte de esta estrategia. Durante la etapa escolar, el alumno/a debe aprender a gestionar su identidad digital haciendo un uso ético y respetuoso con los demás y atendiendo siempre a los aspectos de seguridad. Estas competencias serán esenciales para la futura vida profesional y personal de nuestros alumnos.

El dominio de las lenguas es básico para que nuestros alumnos sean personas abiertas en el mundo. Por este motivo, iniciamos el aprendizaje del inglés desde la educación infantil e introducimos un segundo idioma al inicio de la secundaria, siempre adaptando su aprendizaje a los diferentes ritmos. La progresiva inmersión de nuestros alumnos en inglés se extiende a diferentes ámbitos de aprendizaje. A partir de 4º de primaria, se preparan para la obtención de las titulaciones oficiales de la Universidad de Cambridge con el objetivo de que acaben el Bachillerato con la titulación del First Certificate o Proficiency. Con el fin de favorecer la inmersión de nuestros alumnos en la lengua y cultura anglosajona, la Escuela organiza intercambios que tienen la lengua vehicular francesa o inglesa con escuelas de todo el mundo. Participamos en proyectos internacionales en los que se utiliza la lengua inglesa como vehículo de comunicación, como el Proyecto Erasmus, los Encuentros de Jóvenes Científicos y los Parlamentos Europeos de los jóvenes, donde también está presente la segunda lengua que impartimos, la lengua francesa.

En el entorno actual, es necesario asegurar una formación integral para formar a personas competentes, con unos valores sólidos y éticos, preparadas para integrarse como personas activas y capaces de dar una respuesta responsable y libre a los retos que la sociedad les plantee. Para nosotros, en el entorno actual, es necesario priorizar los siguientes aspectos:

• Creatividad: Es necesario educar a nuestros alumnos en la capacidad de ver la realidad con una mirada abierta y receptiva para saber dar respuestas de manera diferente y diversa, desde un pensamiento divergente.
• Resiliencia: Ante un futuro incierto y variable, necesitamos más que nunca educar a nuestros jóvenes con fortaleza interior y estrategias que les ayuden a salir fortalecidos de las dificultades y los retos con los que se encontrarán.
• Empatía: Conozco, comprendo, comparto. Es necesario trabajar todas las competencias sociales que nos hacen entender la opinión, las emociones, los valores y las formas de hacer de los demás y favorecer el diálogo y las relaciones basadas en el cariño y el respeto.
• Esperanza y compromiso con el futuro: La esperanza es la virtud que nunca puede faltar en los/as educadores/as. Hay que educar a nuestros jóvenes para que se impliquen, para que se sientan corresponsables en la construcción de un futuro mejor para todos.
• Perseverancia: Nuestra cultura huye y esconde el fracaso. Es necesario educar a nuestros jóvenes para que, en caso de no alcanzar un hito a pesar de poner el máximo esfuerzo, sepan valorar y aprender de los errores para volver a empezar.

Y, por encima de todos, la superación personal, la educación en el esfuerzo, en la capacidad de asumir retos propios, ajustados y motivadores y, partiendo de sus fortalezas, trabajar para superarlos y desarrollar así una actitud emprendedora que les permitirá conducir su vida.

La participación de los alumnos en la vida escolar facilita la implicación en el propio proceso de aprendizaje, educándoles para ser ciudadanos activos y participativos. Por eso, los alumnos de la escuela asumen diferentes responsabilidades a lo largo de la escolarización, como los encargos en la etapa infantil, los roles de representación en los consejos de curso o de etapa, o los cargos en las comisiones de convivencia, mediación y sostenibilidad, entre otros. También participan en actividades que tienen como finalidad el aprendizaje entre iguales porque, además de desarrollar competencias sociales, creemos que es la mejor forma de aprender: enseñando y aplicando lo que se aprende. Así, por ejemplo, el alumnado de segundo ciclo de infantil explica cuentos a sus compañeros de primer ciclo; se realizan apadrinamientos de lectura, escritura y matemáticas entre alumnos mayores y pequeños; existen colaboraciones entre compañeros en el aprendizaje del cálculo o los talleres de colaboración de los alumnos de secundaria, etc. Estas actividades ayudan a mejorar la convivencia, lo que convierte a la Escuela en una verdadera comunidad de aprendizaje.

La educación de los ámbitos expresivos de nuestros alumnos es un elemento clave para garantizar un verdadero desarrollo integral. En Virolai entendemos la expresión desde diferentes aspectos:

• La expresión corporal, que se trabaja desde la etapa de infantil hasta secundaria y que pretende el desarrollo psicomotriz, haciendo crecer la capacidad de expresión dentro de un ejercicio creativo.
• La expresión musical, que comporta desde la educación psicomotriz en el campo del ritmo y la coordinación, hasta la educación del oído, la sensibilidad y el gusto por la interpretación y la audición.
• La expresión oral, cuyo objetivo no sólo es que los alumnos sepan expresarse en tres lenguas, como mínimo, sino también la comunicación interpersonal en todos los ámbitos: familiar, social y profesional.

El teatro, la interpretación y la expresión artística posibilitan estas habilidades y les enseñan a gozar del arte.

La evaluación es un punto de referencia y profundización en el progreso personal de nuestro alumnado. Es una herramienta eficaz siempre que se centre en el progreso del alumno/a hacia la consecución de los objetivos de acuerdo con sus capacidades y situación personal, valore y fomente su esfuerzo y lo oriente en su proceso de aprendizaje. La autoevaluación facilita el propio conocimiento, fortalece la autoestima y ajusta la propia imagen. Es a la vez una herramienta eficaz para conseguir una mayor implicación del alumno/a en la propia educación.

Nuestros alumnos y sus familias, mediante el seguimiento tutorial y la plataforma de gestión de la Escola, reciben información continuada del progreso académico y personal de cada alumno/a.

La educación para la sostenibilidad se valora como uno de los ejes transversales que debe implicar a toda la comunidad educativa. Desde la etapa de infantil, nuestros alumnos se implican en el cuidado sostenible de los jardines del centro, cultivan huertos y aprenden a conocer y valorar la biodiversidad. La Escuela forma parte de la Red de Escuelas Sostenibles que reconoce a las escuelas de nuestro país que trabajan de forma preferente la educación ambiental.

La educación para la salud y la salud son aspectos fundamentales en la formación de nuestro alumnado. Nuestra labor educativa en este ámbito tiene como objetivo final la adquisición y la interiorización en nuestros alumnos de valores y actitudes que les hagan tener un comportamiento saludable a lo largo de la vida, a la vez que los empodere para convertirse en agentes activos de salud en el entorno en el que desarrollen su vida. La participación y la implicación activa de las familias asegura la coherencia educativa familia-escuela.

Nuestra Escuela está adherida al programa Fem Salut. Recientemente hemos firmado un acuerdo de colaboración con el Hospital de Bellvitge para el acompañamiento de la escuela en educación en salud.

Ofrecemos a los alumnos un ambiente motivador que les permita conocer otras propuestas culturales para enriquecer su vida. Establecemos salidas, charlas y visitas culturales que vinculen los aprendizajes a la realidad cultural y social.

En Virolai estamos convencidos de que el conocimiento y el respeto por las propias tradiciones favorece el interés por conocer y amar otras culturas. Por eso nuestros alumnos participan activamente en celebraciones populares como la Mercè, la Castañada, el Belén Viviente, el Concierto de Navidad, el ciclo de Carnaval o en actos culturales como los Juegos Florales y Sant Jordi. La Escuela tiene su Colla Gegantera, con dos gigantes, Raimundi y Xofi, que está formada por alumnos, familias y profesorado que participan en las fiestas y encuentros que tienen lugar en nuestra ciudad y en toda Cataluña.